Lo más probable es que todos los que estéis leyendo la entrada del Blog de hoy os habéis preguntado en algún momento a lo que llamamos arquitectura. ¿Es construir un edificio?, o ¿realmente hay algo más detrás?

Las personas que se dedican y nos dedicamos a esta profesión intentamos tener clara esta pregunta, pero es cierto que la respuesta no es directa ni sencilla como parece.

Desde los inicios del ser humano, siempre ha existido la necesidad de protección y cobijo, es este cobijo el que nos define como especie por nuestra creatividad y naturaleza creativa, que inevitablemente evoluciona y se complica con el tiempo.

El primer "nido" que tenemos nos lo proporcionó la naturaleza: las cuevas. El problema con ellas es que son oscuras, frías y húmedas, y fue cuestión del tiempo que buscáramos otras opciones donde estar protegidos de animales y el mal tiempo, pero al mismo tiempo disfrutar de las mejores condiciones para el desarrolo de la vida.

Así surgió la llamada cabaña primitiva, terminó acuñado por el teórico Antonie Laugier en el siglo XVIII. Se refiere al primer edificio construido por nuestras propias manos, casi al inicio de nuestra civilización, manipulando un puñado de ramas y troncos.

Han pasado miles de años y han sucedio muchas cosas durante este tiempo: Egipto, Grecia, Roma, Edad Media, Renacimiento, Barroco, etc.

Además, si lo piensas bien, la arquitectura es un fiel reflejo de la sociedad en la que se creó, y si bien nostros, como especie, hacemos esto a nivel cultural, estaremos en constante cambio. Debemos darle al edificio su debido estatus en el análisis final, todas esas cosas son solo para darle a la arquitectura su debida importancia.

Ha existido desde nuestros inicios, es inherente a nuestra especie y ha sido la arquitectura nuestra compañera durante miles de años. Gracias a ella, nuestras condiciones de vida son infinitamente buenas.

Vivimos dentro y entre edificios, y la calidad de los edificios nos afecta directamente. Aunque piénselo, en lugar de arquitectura buena o mala, solo distinguirá entre arquitectura, lo que no lo es y lo que simplemente puede reducirse  a la construcción.

Lo normal es que demos por sentado que los edificios no van a caerse, que no va haber goteras y que debidamente vamos a estar protegidos de la climatología.

Todo esto "se supone". Esas cuestiones no definen si un edificio es bueno o malo ya que hoy en día eso es lo mínimo que se debería exigir, por las técnicas y materiales que se utilizan.

Con todo esto, ¿qué entendemos por arquitectura?

Ya en el siglo I a.C., un antiguo arquitecto y escritor del Imperio Romano propuso esta primera definición, y también es una de las definiciones conocidas por su sencillez y atemporalidad. Su nombre es Marco Vitruvio, y en su gran ensayo "De Architectura" defiende que todo edificio debe teber al menos tres propiedades: firmeza, funcionalidad y estética. Obviamente, esta definición se sigue usando hoy en día.

Que sea fime es que no se caiga, cuando hablamos de ser funcional nos referimos a que sea realmente para lo que está pensado. Sin embargo, la belleza es un aspecto subjetivo.

La belleza se parece más al hecho de generar un especial interés al contemplar, sentir o estudiar un edificio. También es cierto, que para algunas personas simplemente es observar una maqueta, un plano o simplemente un dibujo.

Algunas definiciones de Arquitectura:

- Le Corbusier: este arquitecto suizo, definió en 1920 la arquitectura como el "juego sabio, correcto y magnífico de volúmenes bajo la luz".

- Bruno Zevi: un importante teórico italiano, centró el foco en el espacio interior, defenciendo y argumentando en su famonoso libro "saber ver la arquitectura" que es lo que verdaderamente importa.

- Alejandro de la Sota: uno de los mejores arquitectos españoles del siglo XX, que decía que la arquitectura es como las piñas, lo bueno siempre está dentro.

Realmente hay muchísimas definiciones más, casi tantas como arquitectos.